sábado, 5 de mayo de 2012

Llamame sin elle

Una en la vida se plantea muchas cosas, que si quiero esto, que si quiero aquello, pero pasa el tiempo y vas dándote cuenta de que no es oro todo lo que reluce, que lo que quieres realmente no es lo mejor para ti. No importa piensas lo quieres y punto, pero no te paras a mirar las conseqüencias que te traerá después. Llega el día en que todo parece gris, no ves salida, no ves ninguna luz para escapar y todo porque lo que realmente querías ya no esta, que mas da dicen, ya vendrá otra cosa mejor, pero tu te das cuenta de que no quieres una cosa mejor, simplemente quieres la que tenias y ya no tienes.
Después simplemente sigues adelante, pones buena cara y vives el día a día, hablas con tus amigos y disfrutas con ellos, sin mostrar lo que sientes realmente, te callas y aguantas. Supongo que más adelante todo cambiara, todo brillara de nuevo. ¿Pero sabéis cual es el problema? El problema es que el ser humano cuando es feliz, cree que durara eternamente y no siempre es así. Por eso aprovecha al máximo tus momentos de felicidad porque igual que dicen que después de la tormenta siempre llega la calma, también puede suceder al contrario.
Pero recuerda que el limite no esta en el cielo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario